20 de enero de 2009

HAY QUE SEGUIR CREYENDO!

Los golpes de la vida muchas veces nos hieren pero también muchas veces nos enseñan, nos hacen más fuertes. Por eso aprendemos a agruparnos, a compartir experiencias, a unirnos con nuestros semejantes, a compartir intereses, a luchar por nuestros derechos, a festejar, a reír, a llorar. Así caminamos, así peleamos, así nos ponemos de acuerdo.
Pensando en la vida, esta vida que llevamos cada día con fervor, con tranquilidad, con tibieza pero con ganas de seguir, a veces sin saber por donde, pero de nuevo alguien o algo, una situación nos alienta y volvemos a levantarnos. Adelante! Es el único lugar que nos queda, pero ahora con más aliento, más ganas y tal vez con más fuerzas.

Pero sabemos que la única manera de progresar es hablando un mismo idioma (no de lenguaje), uno universal, el de la compasión por el otro, el de la comprensión, el de la confianza mutua, la verdad. Ojalá todos pudiéramos darnos cuenta de que necesitamos comunicarnos de esta manera para subir de nivel, en fin, para crecer, y no decrecer, no destruir nuestro planeta, nuestro hábitat, nuestra paz.
ANA SILVIA NARVAIZ

En comunidad siempre es mejor!

Los amigos, los seres queridos, cuanto necesitamos de ellos todos los días, y tantas veces no lo pensamos, ¡que horror! si nos dieramos cuenta que vivir en comunidad, compartir, hablar, tomar un café juntos, darnos una mano cuando lo necesitamos, cura el alma tanto del que lo necesita como del que la tiende.

¿Porqué tanta desigualdad? tatno el poder de unos pocos, como la avaricia son los destructores del espacio en el que vivimos, si en vez de destacar las diferencias destacaramos las semejanzas y cooperaramos los unos con los otros...